Desde el momento de su primera aparición, fechada en 2007, los smartphones han cambiado para siempre nuestros hábitos, convirtiéndose en protagonistas de la vida cotidiana.
Y cada año, las empresas fabricantes lanzan más y más dispositivos innovadores, atrayendo la atención de usuarios de cualquier edad, condición social y necesidades. Los días en que los teléfonos móviles estaban reservados solo para la élite han quedado atrás. Los precios también favorecen el éxito de los smartphones, dado que modelos de primer nivel se ven flanqueados por otros realmente económicos. Pero, ¿qué futuro le espera a los smartphones?
Imágenes móviles e informática fotografía
Uno de los elementos en los que parece centrarse la atención de los ingenieros que se dedican al diseño de nuevos modelos de smartphones es el sector fotográfico. La capacidad de procesar imágenes, combinada con el trabajo de ejecución del software, está cobrando un papel cada vez más importante. Las mejoras en esta área llevarían a los teléfonos inteligentes a reemplazar las cámaras para garantizar la misma calidad.
Teléfonos inteligentes flexibles
Una innovación que, con toda probabilidad, revolucionará el mundo de los smartphones, la representan los dispositivos flexibles. Desde hace unos meses el mercado acoge algunos modelos equipados con pantalla plegable. Los primeros hallazgos son positivos, dada la ausencia de problemas críticos particulares. En cualquier caso, debemos recordar cómo poder plegar un dispositivo completo, y no solo la pantalla, es inevitablemente más complicado. Hasta la fecha, el camino ha sido trazado por prototipos: los resultados aún parecen alentadores. Lo cierto es que un teléfono inteligente flexible le daría al propietario una cantidad considerable de ventajas, principalmente una mayor facilidad de uso. También puede consultar la página oficial de Huawei para obtener más información sobre los últimos teléfonos inteligentes.
Baterías de larga duración: las tecnologías que nos esperan
Hablando de la duración de la batería, en promedio, los teléfonos inteligentes funcionan mejor dentro de los 200 ciclos de carga y luego disminuyen gradualmente. Ahora, usando el teléfono diariamente para hacer llamadas hasta por 2 horas, aprovechar el tráfico de datos por 2 o 3 horas y usar las apps de mensajería, puedes esperar entre 24 y 48 horas antes de recargar. Las alternativas a las baterías de iones de litio aún no están disponibles, pero las ideas no faltan. Algunos investigadores creen que la carga solar es un camino viable; sería una tecnología de fácil acceso y, sobre todo, limpia. Otros, sin embargo, están convencidos de que en el futuro será posible recargar el teléfono inteligente usando la misma señal de Wi-Fi que se usa hoy para conectarse a Internet. Si esta segunda alternativa se hiciera realidad, los cargadores (con o sin cables) solo serían un recuerdo lejano.